Al presentar como cabeza de lista a Xavier García Albiol, conocido por sus posicionamientos xenófobos, el Partido Popular se alinea aún más con la extrema derecha racista.
Durante las últimas elecciones municipales, el PP ya mostró esta cara en diferentes municipios, donde imitó el fascismo de partidos como Plataforma per Catalunya (PxC), con lemas como “Primero los de casa” o campañas contra las mezquitas. Incluso un diputado de este partido declaró en el Parlament: “Hay barrios donde no hay rastro de nuestra civilización”.
Pero el xenófobo más conocido del PP es Xavier García Albiol, ex alcalde de Badalona. Su repertorio de declaraciones racistas es amplio: tildó a las personas inmigradas de ser una “plaga”, ha atacado repetidamente los derechos humanos de las personas musulmanas y al hablar de “limpiar Badalona”, trató a las personas extranjeras de basura. Y ahora, ya durante la precampaña electoral, ha manifestado su voluntad de vetar el acceso de buena parte de las personas inmigradas a la sanidad pública.
Esta retórica es muy peligrosa, ya que promueve el odio, la discriminación y ataca directamente el modelo de sociedad inclusiva al que aspira la mayoría de los catalanes y catalanas.
En los últimos comicios locales, los fascistas de PxC se hundieron, al pasar de disponer de 67 concejalías a obtener sólo 9. Sin embargo, estos discursos xenófobos del PP —y sobre todo del sr. García Albiol— crean el espacio para que el fascismo auténtico vuelva a crecer.
Cuando relaciona gratuitamente a las personas inmigradas con la delincuencia y las señala como responsables de la inseguridad y otros problemas que sufre la sociedad, el PP utiliza el racismo y la xenofobia como una arma electoral, con una total falta de principios. No dejemos que ganen ni un voto con esta sucia estrategia.
No votes racismo. No votes xenofobia. No avales con tu voto al PP de García Albiol.